El empresario español que salva vidas en la Portugal de la era Covid
¿Quién es el empresario español que está ayudando a salvar vidas en Portugal en plena pandemia? La pregunta suena tal vez algo ampulosa, pero responde a una realidad sin paliativos: el trabajo desarrollado por el Grupo Normetal, una empresa sustentada por accionistas lusoespañoles. Su presidente es el bilbaíno Ramón Vecino, cabeza visible de una firma referencia en la Península Ibérica en la construcción modular prefabricada. Su brazo derecho es el portugués Francisco Almeida Leite, vicepresidente en España y CEO en el país vecino, tras haber pasado por el sector público al más alto nivel.
Juntos desempeñan una labor que los lleva a trabajar para los principales hospitales de Portugal. Sus tentáculos se extienden a Mozambique, Angola, Colombia o Perú. También trabajan en España, como reflejan sus proyectos en Madrid o en Ibiza, sin olvidar sus planes en París. Además, incluyen soluciones modulares para residencias de ancianos y túneles de descontaminación. Así han conseguido poner en pie edificios anexos de calidad que han evitado el colapso del sistema sanitario cuando el número de pacientes no hacía más que crecer y crecer.
Aplicaciones muy diversas
Ramón Vecino explica para ABC las claves de un negocio que ha ayudado a equilibrar los hospitales públicos. «Siempre vimos la versatilidad y utilidad de la construcción modular. Sus características de coste y facilidad de instalación, hasta en los sitios más difíciles, permitía su aplicación a viviendas de refugiados, viviendas sociales, colegios y hospitales», puntualiza el presidente. «En realidad, esta es una de sus facetas porque también tiene una vertiente muy profesionalizada e incluso casi de lujo para empresas industriales (oficinas, plantas fotovoltaicas, subestaciones, etcétera), colegios públicos y privados, hospitales y viviendas», añade.
«No es solo un tema de Normetal sino de todo el sector, que ha dado solución puntual a las necesidades de centros e instalaciones de salud y educación en tiempo récord y con calidad óptima», dice Vecino. Con estas premisas, no es extraño que las instituciones hayan establecido cauces de comunicación y negocio en los últimos meses: «Tanto en España como en Portugal ha existido una relación fluida con las Administraciones , que se ha traducido en instalaciones tanto hospitalarias como educacionales a lo largo de 2020», afirma.
Almeida Leite señala que «este negocio es muy interesante porque permite una construcción de calidad y con tiempos de ejecución rápidos. No tarda en volverse más económico y tiene un impacto positivo en la sociedad. Ahora, en esta fase pandémica, es aún más importante porque estamos ayudando a clientes públicos y privados con nuestras estructuras en un momento en que la llamada construcción tradicional no puede dar respuestas. Por eso estamos construyendo tantos hospitales de campaña y para pacientes con Covid de norte a sur de Portugal, por eso estamos construyendo escuelas o trabajando con ayuntamientos y empresas que buscan soluciones sostenibles e inmediatas».’